Corpus et animus

Correspondencia

Antes de largas horas de viaje, sus manos se juntaron, jamás habían hecho algo así juntos... FuE sóLo una Idea... una cámara acompañaba el pensamiento... un beso, los colocó en marcha

Prados verdes entre los viñedos, el sol comenZaba a abrir la neblina de la mañana...

- Te Amo...
- Y yo a ti...

Ella revestía Con un abrigo negro... él con Unos jeans y una sonrisa dificil de disiMular

- ¿Creíste que haríamos esto algún día?

Ella simPLEmente le miró y tras sonreír, la sostuvo durante lArgas horas...

Hace ya muchos aÑOS, imaginó ese instante, pero claro... jamás nada es como la realidad...
sus manos tenían un suave aroma esa mañana, sus besos, difícilmente mas encantadores...


Un paseo de noche por la costa, el oleaje peinando la gravilla, un largo abrazo al dormir, un beso al despertar, un instante a su lado... definitivamente quiero volver allí contigo...


Atte.

Te Extraño

Días

-¿Tienes que volver temprano?
- No, creo que no... ¿por qué?
- Quiero ver si alcanzo a mostrarte algo...

La luz comenzaba a descender, sus manos se volvían frías, sin embargo, aun ella estaba allí con él.

- Creo que lo lograremos... ¿estas cansada?
- Aun no... 
- Entonces nos bajaremos aquí...

Deteniendo el vehículo a un costado de la ruta un imponente monte de arena se presentó ante ellos

- Bajémonos rápido, ahora tendremos que correr! Antes que se arranque!
- ¡que se arranque? ¡quién?
- Ya veras!

El fin de aquel viaje, tras un crepúsculo